miércoles, 5 de noviembre de 2008

Conciente de la triste realidad...

Un jugador cuestionado al inicio del torneo, por su inadmisible curriculum lleno de equipos, sin continuidad y un pasado puma, Rafael Márquez Lugo, ha callado bocas y se ha dedicado a trabajar, es consciente que la liguilla está lejos y América no necesita más que buena suerte.

"Se dio todo como lo esperábamos, (durante el fin de semana) aunque la calificación sigue complicada. Por lo pronto buscaremos hacer lo nuestro que es ganar los dos partidos que restan y lo demás dejárselo a la suerte.

-¿Es triste que el América deje todo a la
suerte?"Sí, así es. Pero es nuestra responsabilidad. El equipo empezó a dar lo mejor casi al final y ojalá y nos alcance, de lo contrario como lo he dicho será un fracaso".