miércoles, 25 de febrero de 2009

Asado en coapa

Jesús Ramírez, entrenador del América, reunió a sus pupilos ayer al final de la práctica en Coapa para organizar un asado y poner fin a los desplantes de algunos jugadores como Édgar Castillo y Enrique Vera.

Ambos elementos han mostrado su descontento por ser relevados ante el Atlas y los Tigres, respectivamente. Sin embargo, el timonel es quien tiene la última palabra. Tan es así, que el domingo ante el San Luis, en el estadio Azteca, ninguno de los dos aparecerá en el equipo titular.
El lateral mexicano sigue con algunas molestias físicas, por lo que será relegado a la banca de suplentes.El famoso "Hommie" tiene severos problemas en la espalda y no se descarta su operación, lo que lo dejaría fuera de lo que resta de temporada. Por su parte, el mediocampista paraguayo cumplirá un partido de suspensión, así que no tendrá acción ante los potosinos.



Castillo reconoce los cambios en América.
Edgar Castillo, defensa del América, aceptó que a partir de la llegada de Chucho Ramírez a la dirección técnica azulcrema, la comunicación con los jugadores mejoró notablemente.
"Sí, como no, ¡cómo decir que no!. Llegó y cambiaron mucho las cosas en ese aspecto. Ha mejorado el equipo, ahora las cosas están mejor",
sostuvo Castillo, quien no dudó en señalar que en este aspecto se ha dado un gran avance a comparación de lo que pasaba con el anterior entrenador, Ramón Díaz.
"Con el Pelado (Díaz) no había como ahora, igual él es un técnico que no se dirige mucho con sus jugadores, cada técnico es diferente, Chucho sí tiene más relación con los jugadores. Ayuda mucho estar así con el técnico", señaló el zaguero del equipo de Coapa.


Convivieron con niños especiales.
Siete niños de Casa de la Sal A.C., organización no gubernamental con albergue permanente para niños con VIH SIDA, visitaron las instalaciones del América y tuvieron la oportunidad de convivir con el equipo de las Águilas, informó el club en un comunicado.
Jhamir, Fernando, Blanca, Rosalía, Alicia, Braulio y Alejandro llegaron al club donde recorrieron las instalaciones, desde la sala de trofeos hasta cada una de las canchas de la institución azulcrema, así como la casa club donde viven algunos jugadores.
Los jugadores del equipo americanista les obsequiaron playeras, entre otros artículos de las Águilas, y además de estos niños de la Casa de la Sal AC, también estuvo presente otro infante, Christian Godínez Salazar, de 14 años, a quien le diagnosticaron Linfoma no Hocking.Christian pudo cumplir con su sueño, que era conocer a Guillermo Ochoa, su ídolo, jugador que lo inspira a salir adelante a pesar de las adversidades.

BUENA ENTRADA
Se espera que el domingo en el Azteca haya una buena entrada, con más de 40 mil aficionados. Desde que Jesús Ramírez tomó las riendas de las Águilas, regresó la fe en la afición, que ha mostrado grandes muestras de apoyo para su escuadra.