jueves, 23 de julio de 2009

Medio siglo de la compra de "El Tigre"

El crecimiento del club con el emporio de Emilio Azcárraga ha sido notable, pese a la última mala racha .

Hace 50 años, la historia del América tomó un curso que cambiaría definitivamente su rumbo. De ser un equipo gris, de resultados mediocres y a punto de la quiebra, se convirtió en el más polémico y en el único capaz de generar sentimientos encontrados en todos los aficionados al futbol, de provocar amor y odio al mismo tiempo.
Hoy se cumple medio siglo de aquella reunión entre el entonces dueño, Isaac Besudo, también dueño de los refrescos Jarritos, y Emilio Azcárraga Milmo, en la que se finiquitó
la venta del club azulcrema.
La noche del 21 de julio de 1959 se anunció un cambio de directiva, y un día después se avisó de manera oficial que el América pasaba a manos de Telesistema Mexicano, hoy Televisa.
Enrique López Huerta, portero del plantel de 1959, recuerda la reunión en un restaurante de Insurgentes, donde les presentaron al 'Tigre' Azcárraga como el nuevo dueño del equipo.

"Tuvimos una comida donde el señor Besudo nos informó que a partir de ese entonces el dueño era Emilio Azcárraga; no teníamos idea que se había vendido el equipo. El señor Azcárraga nos dijo: 'No sé de futbol, pero sí de negocios, y voy a convertir al América en un negocio redituable y en un equipo ganador', y vaya que así fue".
Según información del libro 'El Tigre, Emilio Azcárraga y su imperio Televisa', escrito por Claudia Fernández y Andrew Paxman, ya con el club en su poder, el magnate invitó a Guillermo Cañedo a tomar las riendas del equipo, pues era el mejor directivo de la época y fue directo "al indicarle que no quería que América fuera sólo exitoso, sino que deseaba a un equipo amado u odiado por los aficionados al futbol, que inspirara una gran rivalidad con el Guadalajara, para así subir los ratings en televisión".
Con Cañedo llegó Ignacio Trelles a la dirección técnica del club, pues era el mejor entrenador de la época, y enseguida empezaron a comprar refuerzos del extranjero de reconocida calidad, sobre todo brasileños.
"Cuando ya se vinculan con el otro gran elemento, Guillermo Cañedo, se forma la empresa América, se toma todo ya muy en serio, empiezan a comprar jugadores... en fin, ya hay todo un proyecto. Se dieron cuenta de que el futbol es negocio, que era rentable",
explicó a RÉCORD el investigador Cuauhtémoc Hernández.
Desde entonces, el América ha sido el equipo de los millones, el de las grandes contrataciones, el odiado por los demás, el rival a vencer, y en la actualidad se caracteriza por ser un club que derrocha recursos económicos.

Tomás Coaraza y su nostalgia americanista
Las anécdotas se le vienen como avalancha en la memoria, pero disfruta mucho revivir la vez que Emilio Azcárraga Vidaurreta le reprochó a su hijo por la compra de ese equipo.


Tomás Coarasa aún recuerda con frescura cuando fue gerente administrativo del América. Él, fue parte de la primera directiva del cuadro azulcremas ya en poder de Televisa hace 50 años.
"Emilio no iba muy seguido sobre todo porque él lo compró en lo personal, pues su papá, don Emilio no estaba muy de acuerdo, un día le dijo 'Oye Emilio ¿Qué haces? Para qué quieres un equipo de futbol' A lo que Emilio le dijo, 'Mire Don Emilio, el futuro de la televisión son las telenovelas y el deporte', pues en ese entonces se transmitían lucha libre y box, hoy 50 años después se demuestra que tenía razón".

Y aunque el América pasó a manos del 'Tigre' como parte de una deuda de Isaac Besudo con él, desde el inicio invirtió recursos económicos, cubriendo deudas con los jugadores y cumpliendo con el monto de la nómica que era jugoso para los montos que se pagaban en esa época.
"Aunque la inversión inicial no fue mucha, el equipo pagó las deudas pendientes con jugadores del actual plantel. La nómina era entonces de 200 mil pesos mensuales, la cual era alta para lo que se pagaba en ese entonces, y desde el inicio se invirtió dinero en comprar jugadores de calidad".

El señor Coarasa recuerda con exactitud los primeros jugadores que Emilio Azcárraga autorizó comprar a petición de Fernando Marcos, primer entrenador en la nueva era del América.
"Entre los primeros refuerzos que se compran están Carlos Calderón, y con él vienen otros jugadores que eran el 'Pescado' Portugal, José Manuel Lemus y como regalo en el paquete les dieron a 'Pepín' González, con esos jugadores nuevos Fernando Marcos formó la base del primer América de Televisa, si mal no recuerdo la venta fue por 50 mil pesos más o menos".

Tomás Coarasa trabajó en la parte administrativo junto con Darío Pastrana, Antonio Azulea y Emilio Echavarría. Ya después llegaría Guillermo Cañedo, quien fue llevado a Televisa en un inicio y luego se le encomendó el América.
La charla terminó con el recuerdo de cómo se fue gestando el mote de los millonetas como se le conoció al equipo azulcrema.
"Un grupo de ex jugadores se reunió e ingeniaron un símbolo de una persona de frac con lentes, bien vestido, ellos fueron quienes los diseñaron, y contribuyeron a hacer del América el equipo 'malo' de la película para que la gente se reflejara en la taquilla".


Eduardo Palmer vivió el cambio Águila
Las cosas fueron distintas cuando llegó Televisa
El histórico goleador del América a finales de los 50, Eduardo Palmer, fue testigo de la transformación del equipo. Él fue de los que vivió la época de crisis económica y de resultados y también la del cambio que benefició a todos los jugadores con la entrada de los Azcárraga al club.
"El hecho de que América fuera comprado por Televisa benefició al club y cambió mucho nuestro entorno. Porque antes de eso, el equipo sufría económicamente, de hecho, había apoyos por parte de aficionados, pero con todo eso, por el mal momento que atravesábamos había muchas pérdidas".

Las mejorías se notaron de inmediato, y aunque todavía no gozó de premios por sus goles, recuerda como el equipo tuvo mejores tratos porque la inversión se palpó enseguida.
"Cuando viajábamos a otras ciudades lo hacíamos en tren o autobús, pero cuando lo compra Televisa, ya empezaron a llevarnos en avión, de hecho, implementaron la idea de las concentraciones cuando jugábamos de local, lo cual no era tan común".


Aunque Palmer reconoce que fue hasta la llega de Guillermo Cañedo cuando el proyecto empieza a tomar forma: "Cuando el señor Cañedo los cambios se notaron más, él se encargó de traer jugadores de mayor calidad, se mejoró en muchos sentidos porque le empezaron a meter dinero".

Y como buen americanista, le resulta imposible olvidar que en esa época el Clásico ante Chivas fue tomando mayor fuerza por las circunstancias que el América ya vivía.
"La rivalidad con Chivas empezó a crecer porque al América ya se le conocía como el equipo de dinero, el de las grandes contrataciones, eso provocó más el odio deportivo entre estos dos equipos".