martes, 2 de febrero de 2010

El JJ podría haber huido en Jet Privado

El hombre acusado de dar un balazo en la cabeza del goleador del club América, Salvador Cabañas que lo dejó con“parcial” amnesia, presuntamente huyó en un jet privado desde el aeropuerto de Toluca, Estado de México, a 90 kilómetros del Distrito Federal.
“A ese tipo no lo agarran nunca”, calculó el funcionario de la Procuraduría de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) que reveló en anonimato una línea de investigación por asuntos de droga entre el delantero paraguayo y a su agresor que ostenta siete identidades, entre ellas la de José Jorge Balderas “El JJ”.

“Ya lejos de la Ciudad de México, el delincuente tomó ventaja para huir, apoyado en la red de corrupciones del crimen organizado”, precisó a La Opinión.

De acuerdo con esta conjetura de la policía local, Balderas trabaja directamente para Gerardo González Benavides o Abraham Esparza Plancarte, alias Tony la Mentira o La Bitch, primo hermano de Edgar Valdés Villarreal, “La Barbie”, uno de los sicarios más sanguinarios de México. Las autoridades tienen indicios de que JJ era un narcomenudista “de lujo” que contactaba a figuras del deporte y el espectáculo para venderles drogas tanto en la Ciudad de México como en el Estado de México y Morelos, este último bastión del recientemente fallecido Arturo Beltrán Leyva, el Jefé de Jefes, quien cayó durante un operativo de la Marina. Pero poco se ha podido avanzar sobre esta teoría y dos más que la PGJDF hizo públicas apenas unas horas después del atentado: una riña por los favores de una bailarina cubana y un posible reclamo por un gol, uno de los 123 goles en su carrera como jugador en México, desde 2003.
El pasado sábado, Cabañas “despertó” del coma inducido con una amnesia que le permite sólo recordar buenos momentos y en guaraní, su lengua natal, como en el clásico de la música folclórica de su país “Recuerdos de Ypacarai”. Todo te recuerda mi dulce amor/ junto al lago azul de Ypacarai/ ¿Dónde estas ahora?, mi voz te llama, cuñatai (“mi amor” en guaraní)… Y mientras la policía alistaba una posible comparecencia del delantero, considerado uno de los mejores jugadores del continente americano, el médico Martínez enterraba expectativas.

“El puede dar su declaratoria en el momento en que venga el procurador, pero no va a recordar lo sucedido", dijo en conferencia de prensa.
Por ello más tarde, el subprocurador de Averiguaciones Previas desconcentradas del Distrito Federal, Luis Genaro Vázquez, reculó en sus intenciones de entrevistarse con Cabañas y aceptaron dar más tiempo:
“Esperamos que los médicos nos digan cuándo será el momento preciso”.

La memoria de Cabañas, de 29 años, tiene, en cambio, momentos lúcidos para otros temas.
En ejemplos: el padre del goleador aseguró a un diario paraguayo que su hijo le dijo el domingo que tiene intenciones de jugar en el mundial de Sudáfrica 2010; ese mismo día, el neurólogo aseguró que su paciente vio el partido de fútbol de su equipo y hasta hizo pronósticos, comió, obedeció instrucciones y afirmó “estar bien”, pero no en castellano.

Con el impedimento de tener por ahora la versión directa del afectado, la policía se dedicó ayer a reconstruir los hechos en el bar Bar. Durante siete horas trasladó a los testigos – entre ellos tres bailarinas- y empleados para remontar los hechos que clarifiquen al menos una parte de la historia, pero no dio más detalles.