Tiro de esquina.- Y poco a poco va saliendo todo lo que tiene que salir de las entrañas del América. Resulta que el vestidor se fracturó totalmente, al grado que había jugadores que no se hablaban en el desayuno. Lo de Ángel Reyna acusando a Aquivaldo Mosquera fue sólo la conclusión del escándalo. Un poco antes, lo de Matías Vuoso, enfrentándose con el entrenador fue otro síntoma de la crisis.
Minuto 90.- No le veo ningún problema a que Hugo Sánchez responda que sí le interesaría ser entrenador del América. La pregunta es si Hugo tiene el concepto futbolístico y la capacidad necesaria para sacar al América de la crisis en que se encuentra. Habría que analizarlo. Lo que está claro es que su personalidad, explosiva, algo ególatra, va de acuerdo con los ideales del club.
david.m.faitelson@espn.com