viernes, 20 de enero de 2012

Cabañas, regreso del Hijo Prodigio

por Rafael Ramos Villagrana.
publicado en ESPNDEPORTES.COM

LOS ÁNGELES -- No es el retorno del Hijo Pródigo. Es el advenimiento del Hijo Prodigio.
Salvador Cabañas está de vuelta. Hace casi dos años, el 25 de junio de 2010, recibió un balazo en la cabeza. Hace dos años, se contaban los siglos de su supervivencia como si fueran minutos de muerte. Hoy dos años después, Salvador Cabañas se viste de futbolista nuevamente.

Nadie, ajeno al drama, podría creer la odisea médica, familiar, personal, biológica, fisiológica y deportiva. Nadie. Hay un testigo intocable. Más allá de la memoria intacta de las personas y de los videos y de los diarios. El testigo, inerte ya, fue actor y protagonista. Hoy es parte de la vida y del cuerpo de Cabañas. El testigo perenne es el proyectil de una bala calibre .25.

Sigue ahí. Alojado en la cabeza del guaraní. Es un inquilino indeseable pero inofensivo, inocuo. Vaya, es un huésped contrario a su propia naturaleza: el proyectil calibre .25 es pacífico y pacifista. Es un fetiche amargo de la violencia de un país y de la temeridad de un deportista profesional por desafiar las reglas de comportamiento.

Curioso. Han pasado dos años y hay quienes aún se entretienen más con el pernicioso suceso y se entretienen más castigando la memoria de Cabañas por su desvelo irresponsable, que enfrentar y mostrar respeto a un hombre que, como lo dijeron los médicos, regresó de la muerte, y que hoy reclama una extensión de su vida como futbolista.

María Alonso, la esposa de Cabañas, este viernes en entrevista con Raza Deportiva de ESPNDeportes Radio, relataba emocionada el cambio de vida dos años después. No es para menos. "No llevo una carga, llevo un edificio sobre los hombros", confiesa María, con tono excitado por el retorno de Salvador Cabañas al Paraíso supremo de su vida: una cancha de futbol.

En enero de 2010, María enfrentó el holocausto en su vida. Salvador aparentemente moribundo; la familia en histeria; el golpe frontal de enterarse que el dinero en poder del amigo era ya poder del amigo; y después, América regateando los gastos médicos y el cubrir el contrato del jugador, hasta llegar a complicaciones fiscales en México.

Nada es igual que antes de esa madrugada del 25 de enero de 2010, pero empieza a normalizarse. "Ya arreglamos todo con América, todavía tenemos detalles pendientes con el socio, los abogados están en ello", explica María Alonso, pero amaina las preocupaciones con el momento del jugador.

También Luis salinas charló con Raza Deportiva. Es el presidente del equipo 12 de Octubre de Itauguá, con el que Salvador Cabañas debutó profesionalmente y al que regresa para debutar nuevamente. El 12 de Octubre se convierte en el Alfa y el Omega en la vida del delantero.

Itauguá es una población con 89 mil habitantes, donde los milagros se tramitan en la ventanilla directa al Cielo con la Santa Patrona: La Virgen de Nuestra Señora del Rosario. "Sí, tiene razón, el regreso de Salvador Cabañas no es el del Hijo Pródigo, sino el del Hijo Prodigio", relata Salinas en la charla con ESPNDeportes Radio.

En algo coinciden por separado María Alonso y Luis Salinas, en apego a la cadena de evaluaciones médicas: Salvador Cabañas no volverá a ser el mismo que antes de aquella madrugada del 25 de junio. No lo necesita. "Salvador no tiene que demostrar nada a nadie", comenta Salinas. "No lo contratamos mas que por convicción, porque sabemos que futbolísticamente puede aportar al equipo", dejando en claro que no es una manifestación compasiva.

María Alonso revela con puntualidad los límites de un jugador que antes del 25 de enero era un jugador sin límites en el futbol mexicano y con su selección nacional, al grado que llegó a ser declarado el Rey de América en la votación invernal anual de un diario uruguayo.

1.- Su visión periférica no es la mejor, especialmente en el ojo izquierdo.
2.- Su concentración no es la mejor en la constancia que reclama el juego.
3.- Pero: "Salvador pone el balón donde quiere, justo donde él quiere, como antes".
4.- Lee perfectamente la cancha en los alcances de sus facultades.
5.- Y aclara: "Salvador no está para jugar en Primera División, no a ese ritmo de competencia".

Con ese testigo, ese invasor, ese inquilino relatado, ese proyectil calibre .25, ¿puede Cabañas cabecear? Los médicos en México, Paraguay y Argentina, que estuvieron presentes, desde la "resurrección" hasta estos días, dicen que no hay problema.

¿Cuidados especiales? El club 12 de Octubre, relata Salinas, estará en condiciones de brindarle apoyo y atención requeridas, dentro de sus alcances y las exigencias de los especialistas. "Pero los riesgos en la cancha están ahí para todos, para cualquier jugador, como para cualquiera de nosotros", explica el dirigente del 12 de Octubre, equipo con el que debutó Cabañas a los 18 años, antes de emigrar a Guaraní, Audax Italiano, Jaguares de Chiapas y América., equipo que, curiosamente, fue fundado un 12 de octubre.

"¿Qué si tiene Salvador una estrella? Sí, lo creo, pero hay que estarle ayudando a esa estrella cada día", explica María Alonso, como para esclarecer que los milagros no llegan solos sino con la voluntad de vida de muchos.

Un escritor alemán, Jean Paul, asegura que "el más indestructible de los milagros es la fe humana en ellos". A eso se refiere María Alonso: este milagro es una obra mayúscula de un hombre que nunca quiso dejar de vivir y de un entorno que nunca quiso dejarlo morir. Porque, también explica el orador Robert Ingersoll: "En el momento en que se explica un milagro, éste deja de serlo".