viernes, 24 de agosto de 2012

Colecciona broncas

Christian Bermúdez jura y perjura que es un chico bien portado. Cuando le preguntaron en público cómo era en su vida privada y si lo que ocurre fuera de la cancha podría haber sido una de las causas por las que nomás no brilla al 100 por ciento con el América, el volante prefirió no ahondar en sus problemas maritales y en cambio afirmó que se cuida mucho porque es "muy malo" para desvelarse. Incluso dijo que cuando va a alguna fiesta se retira a las 11 de la noche porque si no se queda dormido: "¿Qué no ven que todavía soy pequeño?" dijo en son de broma, arrancando la risa de más de uno. Los que no son pequeños son los problemas del "Hobbit" y de que le han pegado, me canso que le han pegado.

Y es que ¿quién puede salir bien librado de una tormentosa separación en la cual se dio hasta con la "plancha" con su ex mujer? Tan grueso estuvo el asunto del divorcio que la madre de los 2 primeros hijos de Bermúdez no dudó en quemarlo en el brazo en medio de una discusión. Tan grueso está hoy día que aún está peleando por la lana de la pensión alimenticia de sus chavos y tan gruesa va a estar en el futuro que no quiero ni imaginar cómo le irá al "Hobbit" en unos meses en que sea padre por tercera ocasión, claro, con un nuevo amor. Ya lo dijo Luis Fernando Tena cuando dirigía al América: si las cosas andan bien en casa, eso se refleja en la cancha y si no andan derechas, también se nota en el terreno de juego; desafortunadamente parece que nadie le explicó a Christian Bermúdez y miren que la está pagando en toooodos los sentidos. san.cadilla@reforma.com