by El Francotirador.
Cómo andan, espero que la cuesta de enero ya vaya de bajada para ustedes, porque para mi buen Lapuente fue fatídica y me lo cortaron, pero para el que fue una bendición fue para Carlos Reinoso, quien era el más contento durante su presentación como nuevo técnico del América la semana pasada; no así Michel Bauer, quien denotaba un semblante adusto, digno de un velorio. Entiendo que el cambio de entrenador, cuando los resultados son pobres, lejos de tener que celebrarse o hacer ‘fiesta’, no es mas que síntoma de fracaso y en el caso del presidente de las Águilas uno más en su gestión y se comprende su ‘cara’ de muerto. Pero parece que estas críticas calaron hondo en el directivo, pues en días posteriores, al observar la presencia de fotógrafos y reporteros, por ejemplo en el aeropuerto de la Ciudad de México antes de partir a Guadalajara, caminó por los pasillos muy adelantado de Jaime Ordiales con una sonrisa de oreja a oreja como si él mismo se platicara el mejor de los chistes. Sin duda, mi estimado Michel pasó de parco a ‘Guasón’ con un mensaje a gritos de que ‘Vean que sí me río y estoy contento con la llegada del ‘Maestro’.