“Ganar” es la consigna que tiene desde que era un niño y jugaba sus primeros partidos contra los universitarios, y, le prohibían recibir goles en su portería: “Hay mucho pique (rivalidad), damos el extra por el orgullo de estás dos grandes instituciones, y lleguen como lleguen estos equipos siempre son partidos diferentes, así se siente y se vive en la cancha”.
Además, el partido es clave para nosotros y para nuestras aspiraciones, sabemos que el grupo está muy apretado y que todo se puede definir en los últimos juegos, y Pumas siempre es un rival complicado y aunque no tengan posibilidades de calificar van a intentar ganar, no nos van a reglar el partido y sabemos que si queremos aspirar al título tenemos que cerrar fuerte el torneo”.
Memo confía en que el América mañana saldrá a CU a robarse un triunfo y colocarse en el camino de la calificación, el equipo se ha visualizado en la Liguilla y no están dispuestos a cambiar la situación, aunque entienden que el esfuerzo realizado hasta el momento podría ser inútil si bajan los brazos, pues ante lo apretado que se encuentra su grupo podrían quedarse fuera. “Estamos conscientes de cómo está el torneo y que equipos, con muchos menos puntos, pueden calificar, nosotros con buena suma de puntos no tenemos nada asegurado y hasta podemos quedarnos fuera, pero eso es bueno porque hace que no bajemos los brazos y luchemos hasta el final, nos exige hasta los últimos partidos”.
Reconoció que su afición tiene mucha expectativa de este América, pero no sólo en este partido: “La gente espera mucho de nosotros, que el equipo llegué a la final, que gané el campeonato y hoy estamos para sumarle una estrella más a esta institución”.
La pena ajena como la que está viviendo Pumas, desahuciado de la liguilla de este torneo, no le importa: “Si están Pumas y Chivas, le dan un sabor distinto a los encuentros, pero no pienso en eso, sino en ganarle al equipo que nos toque enfrentar para buscar el campeonato, sólo me interesa lo que hagamos nosotros”
OCHOA SIN PALABRAS.
El encargado de prensa le apagó a el micrófono Guillermo Ochoa, cuando cortésmente el arquero americanista contestaba una pregunta no autorizada
La última y nos vamos… así como dice el refrán es la regla con la prensa en el campamento del América, y, este mediodía le quedó claro a Guillermo Ochoa, porque cuando cortésmente comenzaba a responder una pregunta no autorizada, el encargado de prensa lo dejó sin palabras al apagarle el micrófono. El portero no se esperaba la interrupción, su rostro lo dijo todo, y, sólo movió las manos como quién se ve sorprendido haciendo algo malo, y agregó un “uuuh”.
Enseguida salió rumbo a la cancha bien custodiado y sin libertad para hablar con nadie más: “me regañan”, se disculpó y sólo volteó para ser fotografiado varias veces antes de concentrarse con el América para el partido de mañana contra los Pumas