Adolfo Rosinei regresó el domingo por la tarde a la Capital luego de que superara las primeras 24 horas de manera satisfactoria, sin presentar ninguna secuela inmediata luego del traumatismo cráneo encefálico leve que sufrió el domingo al chocar con el defensa del Santos, Christian Sánchez.
Al mediocampista del América se le realizó una tomografía en el Hospital Ángeles de Torreón, la cual no arrojó algún problema, por lo cual se permitió que viajara en compañía del médico, Joaquín Ledezma, quien esta al pendiente del primer equipo.
Sin embargo, Alfonso Díaz, jefe de los servicios médicos de las Águilas, le aplicará este martes una serie de estudios para descartar cualquier dolencia a futuro y también se le dará el seguimiento necesario a la lesión, que conmocionó al jugador luego de que se produjera el choque accidental con Sánchez.
"Lo valorará el neurólogo de cabecera del club, vamos a darle un seguimiento, afortunadamente todo va muy bien, pues no hubo secuelas iniciales, pero le haremos otra tomografía y una resonancia magnética para seguirlo teniendo en observación", explicó Díaz.
El galeno indicó que antes de dar de alta al brasileño ó definir en que fecha estará listo para regresar a entrenar al parejo de sus compañeros, se deben tener los resultados de los exámenes. "Aunque la primera tomografía no arrojó nada, debemos seguir manteniéndolo en observación y se tienen que tomar todas las precauciones posibles, como son los exámenes, para que regrese sin problemas".
Después de lo ocurrido el 12 de agosto del 2008 a Carlos Sánchez, zaguero del América que sufrió un infarto cerebral el pleno entrenamiento, ahora se han extremado las precauciones para darle un seguimiento más detallado a cualquier golpe de esta naturaleza.