"No hemos cumplido en eso (en los objetivos), somos conscientes, creo que vamos mejorando, algunas veces jugamos muy bien y otras no, pero creo que ya es hora de ser el equipo que venimos diciendo, el que decimos en rueda de prensa y a cada persona que nos encontramos en la calle", dijo Aquivaldo Mosquera.
"Hay que demostrar en la cancha, ya estamos cansados y ustedes están cansados también de que en cada rueda de prensa digamos que estamos conscientes".
Aún sin resolver el choque contra el Puebla, en el Nido de Coapa ya se frotan las manos para adjudicarse el "juego de juegos". En la cabalística fecha 13, Águilas y Chivas se medirán en el Estadio Azteca y el presidente de los emplumados, Michel Bauer, enciende la antorcha de la pasión, mientras se frota las manos, deseoso del éxito deportivo frente al odiado rival. "A mí no me gusta entrar en ese tipo de juegos; para mí la rivalidad es en la cancha, entre las instituciones, en el partido, en el juego. Se calientan, sí, porque se habla toda la semana de quién va a ganar o quién es mejor y hay que demostrarlo. Lo demás para mí sobra, lo importante es sacar el resultado".
"Es el Clásico, no hay otro", entusiasmado de aprovechar la contienda contra el Guadalajara con motivo de los festejos del 94 aniversario del club.
"Para nosotros es un mes de celebración. Ahora coincidió con enfrentar al Guadalajara. Creemos y esperamos que le podamos dar un triunfo, que es un regalo importante, a la afición. En el año esperamos estos partidos, tanto ellos, nosotros y todos los demás seguidores de cualquier otro equipo en México. Creo que la afición siempre está pendiente de estos clásicos y para la rivalidad es importante, para nosotros es vital ganarlos y se desata mucha polémica alrededor de este juego y seguirá existiendo".
Admite que "el orgullo siempre va por delante de lo que puede ser todo este ambiente que se genera y por el resultado. Los equipos pueden llegar muy pegados, disparejos, uno arriba, uno abajo, pero eso a la hora de saltar a la cancha ese día pasa a segundo plano y son duelos encarnizados ahí en el campo".
Orgulloso de encabezar a la legión azulcrema, Bauer confiesa: "Más que en lo personal, es una responsabilidad, un reto y sobre todo tratar de canalizar lo que la afición, el público, todos los americanistas quieren y es una responsabilidad el que esté aquí. Eso, traducirlo dentro de la institución para cumplir los objetivos". En esa labor, "estás como en medio, tratando de pasar una cosa interna; ese deseo dentro de la institución para que se pueda cristalizar. Esa es la función que me toca llevar aquí".
Detalles que no se ven, pero que para nosotros han sido una tarea importante", resalta y luego hasta se da tiempo para compartir un pastel de aniversario con el personal de cocina y limpieza.
Sin candidato para el Tri
"Nosotros ni candidateamos ni apoyamos", dice. "Hay un Comité de Selecciones y lo importante es conocer los proyectos, saber cuál es el de cada quien. Estamos hablando de la Selección y que no es nada más para ciertos partidos o eliminatorias, sino un Mundial y cómo lo vamos a afrontar". Por eso, aguardará las propuestas antes de respaldarlas, con su boleta electoral por resolver.