La salvación del equipo está en su pasado, cuando estaba lleno de canteranos que jugaban como hermanos y defendían la camiseta con honor.
OSVALDO ANAYA
Para Héctor Hérnandez, seguidor del América por más de 40 años, la salvación del equipo está en volver a sus orígenes: un plantel basado en canteranos con uno o dos mexicanos de buen nivel y uno o dos extranjeros, los mejores de México. Esto daba como resultado, recuerda, que los azulcremas se comportaran como hermanos dentro y fuera de la cancha, por lo que su rendimiento se duplicaba.
Reniega de la actual composición del equipo, solamente le convence Christian Benítez, de los demás, no se explica cómo fueron a recalar en Coapa, pero aventura la explicación de que manejos entre promotores los llevaron ahí, por lo que no saben en qué consiste el americanismo y no defienden la camiseta con gallardía.
¿Y quién es este señor? Digamos que, cuando los jugadores del América sueltan la frase hueca: “Estamos en deuda con la afición”, va dirigida a hinchas con sangre azulcrema en las venas, como Héctor Roberto Hernández Pérez-Martínez, que lleva unos 40 años, de sus 49 de vida, coleccionando todo lo referente al equipo que le roba el sueño, lo hace reír y llorar.
Autor de la página de internet: www.realidadamericanista.com, uno de las portales –no oficiales– del América más socorridos por seguidores y periodistas (promedio de tres mil visitas diarias), ha salido en Fox Sports y otros canales de televisión como experto en el tema.
¿Americanismo? ¿Qué es eso?
Al tiempo que muestra, orgulloso, algunos ejemplares del diario ESTADIO de hace 30 años, cuenta la historia de su vida, en la que va intrínseca la respuesta a la interrogante de moda en Coapa y sus alrededores ¿Qué es el americanismo?
Contesta, enfático: “Lo puedes ver. Lo que tengo aquí. Yo nací y lo primero que escuché en casa es ¡arriba el América! Si el América perdía, estábamos todos de malas. Si ganaba, estábamos todos felices. El americanismo es como un sentimiento que embarga a toda la familia, que une. El americanismo también se vive en el estadio, no importa si el equipo pierde, porque ves que los jugadores se la están rajando. Yo he ido al Estadio Azteca desde 1970, 1971, y no he dejado de ir”.
Por lo mismo, su análisis de la crisis americanista incomoda a muchos: “El equipo está como está por culpa del dueño, porque con tantas actividades que tiene, delega totalmente en Michel Bauer, que será muy bueno en los números, pero no tiene la experiencia del futbol profesional. Aparte, alguien le puso a Jaime Ordiales ahí, que no es americanista, no siente los colores. Ha llevado futbolistas que siempre han fracasado en el América, como el 'Topo' Valenzuela, que no tiene nivel para ser futbolista del América. De todas, todas, se equivoca. O le da la espalda al balón, o le bota, o mete una mano faltando dos minutos para que termine el partido. Se avienta como portero, llega tarde, lo expulsan. Yo no recuerdo que Panchito Hernández hubiera contratado un futbolista así. Jamás. Se llegó a equivocar con uno o dos extranjeros solamente.
“En la era Bauer, el único futbolista que vale la pena, y eso porque va empezando, es Christian Benítez. Layún, el 'Topo' Valenzuela,el 'Negro' Medina, Castillo, Robert de Pinho, Chitiva, Márquez Lugo. De todos los que han llegado últimamente no haces uno. Alfredo Moreno... esos futbolistas los trajo Jaime Ordiales. Todos sabemos que tiene un hermano promotor, Mario. Yo no me acuerdo que Panchito se hubiera equivocado con tantos, si acaso con dos o tres ¡pero no con todos!”.
Paso a los jóvenes
Pese a sus críticas, en el fondo desea que América salga de esta crisis: “Si yo fuera Alfredo (Tena), llamaría a los novatos, a los campeones Sub-20. porque tarde o temprano tienen que jugar. Pero lo primero que dijo fue que las figuras (deben sacar del bache al equipo). Ahora ¿Qué figuras? Layún, Rolfi Montenegro. Yo no creo que Layún vaya a salvar al América, o el 'Topo' Valenzuela. Son limitados, no para un equipo como el América”.
Porque un equipo no se compra, se forma: “Trejo, Tena, Manzo, Bravo (que integraban una temible defensa en los ochenta) fueron debutando paulatinamente. En la 74-75 debutó Trejo. En la 75-76 esporádicamente metían a Tena y a Cristóbal. Armando Manzo, Carlos de los Cobos y Juan Antonio Luna debutan hasta la 79-80. Es cuando ya se consolidan. Es un proceso. Pero si no los ponen desde ahorita...
―¿Cuál era el común denominador de planteles exitosos del América?
―Que eran como hermanos en la cancha. Eran americanistas de fuerzas básicas con un refuerzo mexicano y grandes extranjeros, los mejores de México. Imagínate. Con un equipo formado en el América, con los mejores extranjeros de México y con una o dos incrustaciones (mexicanas), no como Layún o Valenzuela.
Héctor tiene una teoría sobre la abrupta salida de Carlos Reinoso: si América comienza a ganar de la noche a la mañana, es que boicotearon al chileno, porque son los mismos jugadores. “Hay de dos: o vamos a acabar en el último lugar porcentual, porque son los mismos. O de la noche a la mañana van a jugar perfecto, se van a componer por obra y gracia de Dios. ¿Qué significa esto? Que le pusieron la cama a Reinoso. Eso va a demostrar que ellos hicieron todo lo posible para sacar al entrenador.