Ganar la Copa del Mundo es la principal meta del portero de la Selección Mexicana
Levanta la copa, gustoso. "Será un año diferente", anuncia. Ya siente la energía mundialista, la goza. Toma sidra, come las uvas y lanza el deseo ambicioso con motivo del Año Nuevo, uno muy especial, pues 2010 es año mundialista.
Guillermo Ochoa, portero de la Selección Mexicana y del América, quiere salir airoso con sus dos
compromisos, pues desea dejar a las Águilas encaminadas a la conquista del título, mientras él trasciende a nivel internacional con el Tri. "No hay que ponerse límites", aconseja Memo, en sesión exclusiva con RÉCORD.
"Tenemos que darle la importancia que se merece al torneo (Bicentenario 2010), el América es importante para mí, me debo a ellos. La idea es hacer las cosas bien con el América, no se le resta importancia al torneo por ir a jugar el Mundial; antes de ir con la Selección quiero dejarlos arriba en la tabla, dejarlos encarrilados hacia el título y después jugar el Mundial", dice, enfundado en la casaca nacional…
Desde ahora, Ochoa sentencia que el combinado mexicano será un sinodal de respeto en la justa mundialista. Mientras sostiene el balón Jabulani, con el que se disputará el torneo en Sudáfrica, el portero advierte que el Tri será exigente.
"México no va a ser nada fácil, tenemos que mostrar carácter, garra, entrega, orden. México es un equipo que trata bien el balón, nos ha salido bien en las eliminatorias, no nos vamos a regalar", dice, convencido. Eleva la mirada, se ve en Europa. La asignatura de emigrar al futbol del Viejo Continente está pendiente; después del Mundial quiere cristalizarla.
"Es un escaparate bastante grande (el Mundial), todos los ojos van a estar encima, mucha gente va a estar tras los juegos. Son partidos en los que, si uno lo hace bien, tienes muchas posibilidades de dar el brinco. Me visualizo ahí, es algo que no voy a dejar de hacer, me visualizo de esa forma, uno tiene que empezar a ver que ese objetivo se haga realidad".
Detrás está el árbol de Navidad. Posa, sonríe y ya anhela disputar su primera Copa del Mundo como arquero titular de la Selección Mexicana. "Un Mundial no se compara con nada, ahora tengo la posibilidad de jugar y tengo la ilusión de hacer un gran papel con México y hacer historia".
Después de todo, Ochoa es un soñador. "Vamos a buscar levantar esa Copa, el sueño nadie me lo va a quitar". Feliz deseo.