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Acaba de realizarse el sorteo de la Copa Libertadores del 2011, en un importante acto, en la sede de la Confederación Sudamericana de Fútbol en Paraguay. Todos estuvimos observando con atención el cumplimiento del evento pero, parece que muy pocos (seguramente porque son jóvenes y no conocen) tomaron en cuenta lo que ocurrió previo al sorteo. Pues, se premiaron a distinguidos elementos del balompié internacional, como jugadores, dirigentes y periodistas.
Y, justamente, el premio que se entregó a Salvador Cabañas, gran jugador paraguayo de años anteriores y, en su calidad de goleador de dos torneos sudamericanos, se llamó “Alberto Spencer Herrera”. Lamentablemente, ni el anunciador ni los restantes periodistas, dieron mayor importancia a ese premio, seguramente, porque no conocen quien fue este gran deportista ecuatoriano. Nada menos, que el goleador de la Copa Libertadores de América, durante los 51 años de vida del evento internacional, al haber marcado 54 goles. Defendiendo en la mayoría del tiempo, al Peñarol de Montevideo.
¿Porqué es tan importante esta situación?, simplemente, porque quien le sigue en número de goles, está muy lejos de alcanzar este número. Por ello, para quienes si tenemos memoria porque somos gente que lo vio jugar en los años sesenta, habiendo sido una gloria del deporte de nuestro querido país, nos ha llegado al corazón, porque un ecuatoriano, es distinguido de esta manera, en un evento sudamericano.
Ojalá, se acordaran de tanto deportista de antaño que, posiblemente estén olvidados, ya que, en esas épocas, no les pagaban como para que puedan vivir, actualmente, en mejores condiciones. No voy a dar nombres, por temor a olvidarme de muchos pero, todavía están vivos ex – deportistas, que también deberían ser reconocidos. Cierto es, que hay que vivir el presente, mirando siempre al futuro pero, nunca olvidando su pasado.