martes, 28 de mayo de 2013

Sencillamente épica

A própósito de...
FINAL
Histórica, emocionante e inolvidable; así será recordada la Final entre América y Cruz Azul, misma que podría llenar libros y programas describiendo las sensaciones que experimentamos quienes fuimos observadores durante esas tres horas, y no se diga los protagonistas del partido más emotivo en muchos años.
Noche de contrastes y enseñanzas, porque nada hay como el triunfo, mientras que, “del plato a la boca se cae la sopa”, y esto no se acaba…hasta que se acaba.
Ignoro cuánto dinero haya utilizado Televisa en toda su historia para pagar a los guionistas de sus más exitosas novelas, pero estoy convencido que, ni el mejor de los argumentos igualaría la tensión y desenlace que el destino les hizo vivir en el Azteca la noche del domingo.
Con roles de antagónicos, villanos, héroes, actores de reparto y un final con llanto, besos, abrazos, risas y sudor. Escenas no actuadas que ya han pasado a la memoria eterna del futbol mexicano.
Y estoy convencido de que pocas veces (o tal vez nunca) los americanistas volverán a vibrar con algo similar.
Lo dijo... Peláez
“El piojo es un chin...” y momentos después en el vestidor también el dueño del equipo Emilio Azcárraga se subió a una banca y llamó al técnico para felicitarlo. “Por sus hue...”. Se vale cuando la pasión del futbol rebasa investiduras.
Mientras en el otro vestuario el utilero escondía las playeras de “Cruz Azul Campeón de Liga”, que de nuevo se quedarán sin estrenar.
La trivia...
¿Qué les habrá dicho Herrera al medio tiempo cuando tenían todo en contra?
Del mundo...
No tengo duda que ha sido el partido de la liga mexicana más cubierto por la televisión en toda la historia. Cientos de cámaras ubicadas en cualquier posición, enlaces dentro y fuera del estadio, helicópteros, lentes que volaban, transmisiones por la multiplataforma, el canal 2, 9, TDN, narraciones alternativas, redes sociales, internet y programas previos incluso de sus competidores Fox Sports, TVC Deportes y ESPN. Nunca jamás antes hubo tanto despliegue.
La fecha...
El domingo 14 de mayo del 2006, Pachuca caía 3-1 ante Chivas en el Hidalgo y con ello quedaba eliminado en la Semifinal de vuelta del Clausura. En el minuto 93 los Tuzos cobran una falta, Calero se agrega para rematar y entre él y Aquivaldo consiguen un emocionante gol. Curioso que de nuevo Mosquera y su arquero hayan tenido que ver con otra resurrección.
El chisme...
Hace un par de meses escribí una columna dedicada a Miguel Layún en la que di mi punto de vista sobre lo que consideraba una cacería injusta y el “#todoesculpadelayun”.
Días después su padre del mismo nombre y director de una agencia de publicidad en Córdoba Veracruz me escribió un emotivo agradecimiento y de él me acorde la noche del domingo. Esa familia ha aguantado de todo.
Mi queja...
Las escenas ahí se quedan. La cancha lluviosa, el lleno total, las atajadas espectaculares de Corona, una expulsión injusta para Molina, el profesionalismo de Chaco que no quiso salir, un tercer gol celeste que de milagro no entró, el coraje del América que nunca se dobló, la locura manifiesta del Piojo, el llanto cruzazulino en la premiación, la actitud del ‘señorón’ Perea felicitando al Campeón, el vuelo de ‘palomita’ de Moisés, la celebración pasional de Azcárraga... todo, todo se debe quedar en la película de este juego. No hay desperdicio en la cinta… ¡Las hazañas aún existen!.

POR ANTONIO MORENO PARA EL DIARIO RÉCORD.