Del lado azul se han quemado cientos de neuronas en busca de una respuesta al por qué del dominio del América en los últimos seis años. Nada, siguen bajo el yugo emplumado. En tanto, Guillermo Ochoa, portero amarillo, define las razones de la paternidad. "Nos acoplamos bien al juego, a los partidos con presión, a la tensión que existe alrededor de estos duelos, también a la cancha y al ambiente, lo que nos ha favorecido para bien", enlista el guardameta americanista, quien no se empacha con el tema de incrementar una estadística: "no te hace campeón, tenemos que ganar para sumar puntos y seguir en el camino".
Ochoa habla más de una fuerte rivalidad que de un clásico, de un partido esperado por la afición, que estos equipos se dividen en la capital del país, de donde se desprenden pasiones a las que los futbolistas no pueden estar ajenos. En resumen, dice, en América han entendido lo que representa para la gente y esa ha sido la clave para tener los números que hoy le ponen calor al duelo. Como con cada partido de esta categoría, el portero americanista se guarda recuerdos especiales frente al Cruz Azul, contra el que no ha perdido desde que se hizo cargo por completo de la protección de la meta emplumada en el no tan lejano Clausura 2005. Y fue precisamente en ese torneo en el que vivió la mejor experiencia ante los Cementeros.
"Recuerdo mucho el de las semifinales, es el más clave que me ha tocado ante ellos, porque fue el paso previo al campeonato", rememora el meta, quien tiene una marca de nueve juegos ante La Máquina, de los que se desprenden siete victorias y dos empates. Además, en este lapso, solamente se ha perdido un par de duelos ante el Cruz Azul por estar concentrado con la Selección Nacional para el Mundial de 2006 y el preolímpico de 2008. "Afortunadamente me han salido bien las cosas en estos partidos. Esperemos que el sábado salgan de la misma forma, pero no nada más a mí, también a mis compañeros y a la institución, que necesita el triunfo".
Para mañana, agrega, "nadie te asegura que vas a ganar" a pesar de los seis años de jerarquía sobre los azules, "pero sí sales con la idea de sacar un buen resultado. Verán al América que se ha visto en los últimos partidos, que trata de buscar el resultado para conseguir tres puntos muy importantes".
Ochoa no ve sólo a un personaje del cuadro rival, los estudia en grupo, valora lo peligroso que puede ser confiarse a la racha. "Será muy parejo, el torneo apenas comienza, como para poder decir cómo andan los equipos, pero son juegos que si ganas, te permiten trabajar con tranquilidad. Ahora tenemos dos triunfos seguidos y queremos mantener ese paso".