miércoles, 21 de abril de 2010

Miercoles previo a santos

Armando Navarrete no pierde el tiempo en prender una veladora, él prefiere enfocarse en trabajar, en pulir errores y tratar de calificar a la Liguilla. El arquero asume el compromiso que tiene en las manos, por eso juega su papel y trata de impregnar en el equipo la confianza que de él emana. “Nos sentimos con el compromiso del domingo ganar como sea, claro que dependemos de resultados, pero nos sentimos con el compromiso de ganar para así esperar para calificar; es incómodo llegar a esta instancia, pero mientras haya la esperanza de calificar tenemos la ilusión de llegar a la Liguilla.
Yo puedo cargar este equipo y tener una gran responsabilidad de calificarlo, me da ilusión de que me den la oportunidad. Tengo un compromiso grande y yo puedo meterlo a la Liguilla”.


El arquero se siente molesto e insatisfecho por la situación que el equipo vive por eso no le tiene miedo a decir que si “América no califica es un fracaso”; sin embargo, trata de no pensar en ello y se enfoca en ser positivo, en encontrar el camino que los lleve a cumplir los compromisos, pues de lo contrario sabe que están a merced de la Directiva, pues ellos sólo son “empleados”. “A todos nos inquieta y molesta que no calificamos porque nosotros también nos jugamos nuestro trabajo, porque no podemos llegar a una Liguilla más tranquilos, dependemos de resultados, y la verdad aquí es que somos empleados que damos resultado y cada quien en su conciencia tiene lo que dejó de hacer; aunque ahorita tenemos la oportunidad de hacer un América diferente para poder calificar”.

Armando Navarrete no quiere visualizar a las Águilas fuera de la Fiesta Grande, de hecho aseguró que si “América entra, la Liguilla tendría otro sabor”. El arquero sólo piensa en positivo, en llegar a las últimas instancias y ahí poder enfrentarse contra Monterrey para saldar viejas cuentas o contra las Chivas; lo que quiere es disfrutar de una intensa Liguilla. Sin embargo, su futuro será echado el sábado cuando Morelia, Atlas y Cruz Azul jueguen en sus distintas trincheras, entonces América podría llegar a cerrar el torneo regular, frente a Santos, sin nada que jugarse, con las esperanzas rotas y el orgullo herido; pero aún así, para Armando el último duelo lo tendrán que jugar como si fuera una final.

“Sea como sea tenemos que ganar el partido, tenemos que disfrutar cada partido, dar la cara, si se da un resultado negativo (antes de jugar contra Santos) como profesionales tenemos que dar la cara y jugar bien. Si yo viera eso (baja de rendimiento en mis compañeros) le diría que no jugara con mi trabajo o el trabajo de otros”.

ESQUEDA QUIERE JUGAR EL DOMINGO.
Entrevistado afuera de Coapa, el atacante explicó a RÉCORD que está ansioso por jugar de nuevo. "Espero ya pronto regresar".

Sin embargo, reveló que le falta un poco para estar totalmente recuperado de la cirugía en la rodilla derecha donde le extrajeron un pequeño fragmento luxado del menisco lateral. "Todavía no al 100 por ciento. Me falta un 10 por ciento". No obstante, Esqueda espera ser tomado en cuenta por el técnico Jesús Ramírez el próximo domingo ante Santos, un duelo vital para el América y que necesita ganar para poder calificar si se da una combinación de resultados. "Sí, ojalá".