El delantero continúa delicado, pero el doctor aseguró que este jueves fue el mejor día del delantero desde que entró al hospital. Salvador Cabañas tuvo su mejor día desde que llegó al hospital, pues el edema que tiene en el cerebro aparentemente comenzó a disminuir, sin embargo sigue reportado como grave. "Salvador ha continuado delicado, pero está evolucionando con mejores parámetros, se le hizo un nuevo estudio, se ve que el edema cerebral parece que comenzó a bajar y sus signos están más estables, empieza a tener algunos movimientos voluntarios y tenemos que seguirlo apoyando", dijo Ernesto Martínez Duhart, neurocirujano que atiende el caso.
"No podemos despertarlo porque se inquieta mucho, tenemos que seguir apoyándolo con buena oxigenación y nutrición para que siga evolucionando. Hoy ha sido un mejor día desde que llegó aquí, cada vez está más estable y eso es muy alentador".
El médico reiteró que si llega a despertar, Cabañas no se acordará del incidente que lo tiene entre la vida y la muerte. Martínez Duhart explicó que el hecho de que haya movido sus extremidades (brazos, hombros y manos) es muy bueno porque eso habla de integridad de vías neurales, que tienen que ver con la corteza cerebral. "No nos podemos confiar porque se requiere de mucho apoyo, la sedación se mantendrá y por momentos haremos ciertas evaluaciones".
El médico descartó que le haya apretado la mano a su esposa, María Alonso, porque indicó que el jugador del América todavía no puede llegar a tener una comunicación de este tipo. "Si puede reconocer una voz familiar, pero no creo que haya habido una comunicación así (apretándole la mano), muchas veces reconoce a una persona porque el corazón aumenta su frecuencia, es un signo para decir que está reconociendo algo".
Alfonso Díaz, jefe de los servicios médicos de las Águilas, explicó que los movimientos que realizó Cabañas pueden ser reflejos, pues mientras no esté despierto no se puede tener la certeza de que lo hace conscientemente. Martinez Duhart admitió que Celso Fretes, neurocirujano que llegó proveniente de Orlando y que fue enviado por la embajada de Paraguay, se fue satisfecho con el manejo que se le está dando al goleador. "Este médico está en Orlando, este hospital compite con los mejores del mundo, tenemos todo y no necesita ser trasladado para nada".
Martínez Duhart afirmó que el hecho de que no haya aumentado el edema es la mayor ganancia del día, pero no quiere decir que si empieza a bajar va a ser nuestra la mayor expectativa.
"No hemos dicho que ya salió del peligro, sigue con los mismos riesgos, con la misma gravedad y en la sala de terapia intensiva. Claro que puede empeorar no estamos excentos de riesgos".