América prepara para este domingo un homenaje para Salvador Cabañas. El equipo, que sigue consternado después de que su delantero estrella recibió un impacto de bala en la cabeza mientras estaba con su esposa en el Bar-Bar, se rendirá ante la grandeza de su amigo. Con una manta tratarán de darle ánimo y en su uniforme especial, que evoca a los años más grandes del americanismo, portarán el número 10 en la manga. El Estadio Azteca que parece lucirá a su máximo esplendor, pues la afición se reunirá para orar por el guaraní, tratará de juntar energía positiva para hacérsela llegar al delantero quien pelea por seguir con vida y ha dado muestras de que no se rendirá.
Cabañas después de haber despertado por la tarde, alrededor de las 15:30, recibió en su habitación a su familia, los miembros de la Delegación Paraguaya y el Presidente del América, Michel Bauer, junto con Jesús Ramírez técnico del equipo. Ahí todos comenzaron a celebrar el inicio de lo que parece ser una recuperación asombrosa.
Después, Bauer y el estratega Jesús Ramírez se trasladaron al hotel de concentración del cuadro azulcrema, que se encuentra a un costado del Hospital donde permanece Cabañas, para transmitirle al grupo la situación del delantero y así poder llenarlos de esperanza y alegría.Tras haber sido enterados, Adolfo Rosinei junto con el Capitán Pável Pardo fueron los encargados se visitarlo para refrendarle el apoyo que Cabañas tiene de todo el equipo. "Estamos contentos, estamos muy felices", declaró Pável Pardo quien permaneció en el nosocomio unos 20 minutos y después lo abandonó para regresar a la concentración de las Águilas.