El padre de Salvador Cabañas arribó la noche de este martes a la Ciudad de México para estar al lado de su hijo en tan complicada citación después del balazo que recibió en la cabeza, lo que ha puesto en serio predicamento su vida. Su semblante refleja tranquilidad, consciente de que el estado de salud de su hijo ha ido mejorando al pasar de las horas, no obstante, lo complicado de la situación. Alrededor de las 10:30 de la noche, se le vio con varios jugadores Paraguayos, como el caso de Riveros y de Darío Verón, en un restaurante del nosocomio. El susto parece quedar atrás, compartía comentarios con un rostro sereno y su estado de salud también se percibía mejor luego de que no pudo realizar el viaje a México al mismo tiempo que su esposa, al haberse sentido mal de la presión, lo que lo obligó a retrasar por unas horas su traslado. Dionisio Cabañas, padre de Salvador Cabañas, dijo hoy que no le importaba si su hijo abandonaba el futbol con tal de que siguiera con vida.
"A nosotros no nos importa que juegue o no juegue más. Lo importante es que resista. Él es fuerte y yo estoy seguro que va a resistir", dijo en tono optimista, pero consternado Dionisio Cabañas antes de viajar a México.
Dionisio había sufrido una descompensación el lunes al enterarse de lo sucedido con su hijo, por lo que pospuso su viaje. Estaba programado que viajara con su esposa Basilia Ortega, quien ya se encuentra en el Distrito Federal. "Mi padre ya está mejor. Ayer (por el lunes) estaba muy mal. No podía detener el llanto", describió Édgar Cabañas, hermano del astro de las Águilas y elegido en 2007 el mejor futbolista del continente americano.
"Yo pienso que va a resistir y que no nos va a defraudar. Siempre él sale ganando".
En Paraguay se formaron cadenas de oración desde el lunes pidiendo por la vida de Cabañas y este martes se realizaban convocatorias espontáneas para marchar en silencio por las calles céntricas de Asunción con la intención de solidarizarse con el ídolo deportivo.