Lapuente fue quién le otorgó la nueva oportunidad al salido de la cantera Rodrigo Íñigo, salió debido a los malos resultados a lo fragil que se mostraba la defensiva y al deshonroso año 2008.
"Aprendí mucho durante el año que estuve fuera, la verdad que pelear un descenso es una situación muy fuerte, con Querétaro me tocó curtirme en cosas muy duras, a diario se lidia con la presión y en cada partido te vas jugando prácticamente la vida. Pero hoy me siento más maduro, con más experiencia y eso estoy seguro que se va a notar, porque también valoras lo que es una institución como el América, todo lo que te da, las facilidades que tienes para desempeñar tu trabajo y eso te hace una persona que toma una conciencia diferente".dijo Íñigo.
Al hablar sabe a donde llega, no niega la vergüenza que le tocó vivir como jugador en el trágico momento cuando el equipo fue último.
"Me tocó vivir un año muy duro en el América, como fue el 2008, cuando tocamos fondo en la Liga, cuando no encontrábamos el camino, eran otros tiempos y recuerdo como por más que hacíamos las cosas no se nos daban.
Ahora veo un plantel de mucha calidad, muy ordenado, con un estilo de juego definido y pienso que ajustando las piezas necesarias va a ser un rival muy fuerte durante la Liga y también en la Libertadores, porque ya sé lo que significa ese tipo de competencia".
América inició trabajó físico a doble sesión en Cancún, bajo el mando del preparador físico, Axel Bierbaum.