“Primero que venga la llamada, es la única circunstancia, mi mejor representante es mi trabajo, mi teléfono lo conocen, que venga el llamado, que nos sentemos a platicar y que lleguemos a un acuerdo, habrá muchas cosas que platicar, pero sin una llamada no hay nada que especular y menos con algo que todavía no es tangible”.
Aceptó que aunque está “muy contento en Atlante, si llega una propuesta de América por supuesto que la voy a escuchar, es un equipo en el que me gustaría estar, pero hasta que no se de algo, sólo quedará en rumores, porque no es la primera vez que mi nombre se escucha en otro equipo y a mí no me cae el telefonazo”. Hasta que el tiempo diga la verdad, bien dicen que si el río suena es porque agua lleva.