martes, 1 de noviembre de 2011

Carlos Santos: Yo hablaría con Reyna

Antonio Carlos Santos comprende por lo que pasó Reyna cuando declaró en contra de sus compañeros al argumentar que el número 18 siente la camiseta y por eso le daria otra oportunidad: “Dejaría que Reyna volviera, antes platicar con él. Reyna habló porque siente los colores, porque quiere estar ahí... Platicando con él no hay ningún problema, dejar en claro que nadie puede salir”.



Y aunque remarcó su buena relación con Luis Roberto Alves y Alfredo Tena, el brasileño dijo que equivocaron al separar al delantero por sus declaraciones. “Tengo buenos amigos en el club, uno es Zaguinho y otro es Alfredo Tena, pero no estoy de acuerdo en cómo se trató el tema; creo que no era para castigarlo sólo por un comentario, ‘defensa de plástico y capitán de agua’, pues es la realidad que se está viviendo, yo creo que el chavo hizo un comentario y a quien le quede el saco, que se lo ponga”.

Explicó que los problemas del equipo se originan desde que se decide contratar refuerzos por los que pagaron un precio muy alto. “No puedes calificar a un equipo que invirtió 10 millones de dólares en un centro delantero (Benítez), que invirtió en un lateral derecho como Paul Aguilar, que se ha invertido en gente como Vicente Sánchez, el regreso de Vuoso. Vaya, ¿cómo puedes calificar a esto?, no hay calificación, los números son fríos y ahí están sus actuaciones”.

El brasileño cuestionó el hecho de que no exista en la actualidad un jugador con la autoridad para darle respaldo a los jugadores de menos experiencia. “El América necesita un jugador que cargue el peso, que tenga el liderazgo para poner en su lugar a muchos jugadores jóvenes y ayudar a hacer bien las cosas. En la cantera están en el proceso de conseguir un líder, pero los mejores jugadores que ha tenido el América han sido extranjeros, los demás han sido grandes futbolistas pero con el complemento de los extranjeros”.

Recordó procesos anteriores, en los que se contrataba a figuras extranjeras, pero se les permitía a los jóvenes tener oportunidades, cobijados por los más experimentados. “Desde que Lapuente tenía al equipo, traían a gente grande y no dejaban que salieran los jóvenes; hoy ya los tienen, pero falta encontrar a otros jóvenes que ya tengan más experiencia y buen nivel futbolístico para que ellos mismos empiecen a disfrutar de un mejor futbol”.